La lubricación de las cajas de cambio manuales: todo lo que tienes que saber

La caja de cambios es un componente crucial en cualquier vehículo, ya que es la responsable de transmitir la potencia del motor a las ruedas.
05 noviembre 2024

La caja de cambios es un componente crucial en cualquier vehículo, ya que es la responsable de transmitir la potencia del motor a las ruedas. El lubricante es importante para asegurarnos que la transmisión sea suave y eficiente. Su funcionamiento depende en gran medida de una lubricación adecuada, que no solo reduce la fricción y el desgaste, sino que también protege los componentes internos de la corrosión y las altas temperaturas. 

En este artículo, explicaremos en detalle cómo funciona la lubricación de una caja de cambio manual, su importancia y las mejores prácticas para profesionales. Además, aprovechamos para recordarte que en nuestro blog puedes encontrar otro post sobre la lubricación de las cajas de cambio automáticas.  

¿Por qué es importante la lubricación?

La misión del aceite de transmisión manual es mantener la caja de cambios lubricada, proporcionar estabilidad térmica y garantizar el funcionamiento ante altas presiones o cargas. También protege los rodamientos, que son esenciales para un funcionamiento suave, y los sincronizadores, que permiten un cambio de marchas sin problemas.  

En consecuencia, se logra un mayor rendimiento y vida útil del vehículo y se reducen molestias como las vibraciones o ruidos. 

¿Cómo funciona la lubricación de una caja de cambios manual?

El aceite de la caja de cambios manual crea una película lubricante entre los engranajes, rodamientos, sincronizadores y otros componentes internos. De esta forma, reduce la fricción y el desgaste, permitiendo un funcionamiento suave y eficiente. Además, ayuda a disipar el calor generado por estos contactos, protegiendo los componentes de las altas temperaturas.  

Mientras que algunos modelos más básicos funcionan con lubricación por salpicadura, donde los engranajes giratorios levantan y distribuyen el aceite, la mayoría de las transmisiones manuales modernas utilizan un sistema más complejo.  

Este consiste en una bomba que suministra aceite a presión a los componentes críticos, como los rodamientos y los sincronizadores. Al mismo tiempo, se utiliza la lubricación por salpicadura para acceder el resto de las áreas a las que no puede llegar con ese método.  

En algunos diseños de alto rendimiento o para aplicaciones específicas, también se utilizan pulverizadores o inyectores para una lubricación aún más precisa y eficiente, dirigiendo el aceite directamente a los puntos de mayor fricción.  

Propiedades de los aceites de caja de cambio manual

Los aceites de transmisión manual deben reunir una serie de requisitos para garantizar un rendimiento óptimo, entre los que se destacan: 

  • Viscosidad. Es un parámetro que mide la resistencia del aceite a fluir, por lo que es crucial para mantener una película lubricante efectiva bajo diferentes temperaturas. Una viscosidad demasiado baja puede no proporcionar suficiente protección, mientras que una viscosidad demasiado alta puede aumentar la resistencia y reducir la eficiencia. 
  • Aditivos antidesgaste. El aceite debe proteger los engranajes y rodamientos del desgaste, incluso bajo cargas elevadas. Esto se logra mediante aditivos antidesgaste que forman una capa protectora sobre las superficies metálicas. 
  • Antioxidantes. Sirven para evitar la formación de depósitos, lo que podría obstruir los conductos, y ayudan a prevenir la degradación del aceite por la exposición al oxígeno y el calor. 
  • Inhibidores de corrosión. Su función es proteger los componentes internos de la corrosión, por lo que neutralizan los ácidos y forman una barrera protectora. 
  • Aditivos de extrema presión. Son críticos para proteger los engranajes bajo cargas extremas, previniendo el contacto metal-metal y el desgaste severo. 

Tipos de aceites de transmisión manual

Existen diferentes tipos de aceites para cajas de cambio manuales, cada uno con características específicas:

  • Aceites minerales. Son los más comunes y económicos, obtenidos directamente del refino del petróleo. Ofrecen una protección adecuada en condiciones normales de operación, pero su rendimiento puede verse afectado en temperaturas extremas. 
  • Aceites sintéticos. Son fabricados mediante procesos químicos que permiten un mayor control sobre sus propiedades. Ofrecen un mejor rendimiento y protección en un rango más amplio de temperaturas, además de más resistencia a la oxidación. 
  • Aceites semi-sintéticos. Combinan las ventajas de los aceites minerales y sintéticos y sus características dependen mucho del desarrollo concreto de cada producto. 

Cómo elegir el aceite de caja de cambios adecuado

El tipo de lubricante que se debe usar depende de la marca, modelo y antigüedad del vehículo en cuestión. Eso sí, lo más recomendable es seguir siempre las recomendaciones del fabricante, que encontrarás en el manual del vehículo, donde se especifican la viscosidad y las especificaciones requeridas. Ahí también se indica el intervalo de tiempo que debe pasar para el cambio de aceite.  

Otra opción es utilizar el buscador de lubricantes de Repsol, que te permite encontrar el aceite que necesita la caja de cambios manual con solo teclear el nombre del modelo o la matrícula.  

También te recomendamos que eches un vistazo a la gama Navigator, que ofrece un amplio catálogo de productos para transmisiones manuales. Estos lubricantes tienen una gran capacidad para soportar cargas, brindan una conducción suave y fluida y reducen el consumo de combustible de forma notable. Además, son aptos tanto para vehículos ligeros como pesados o maquinaria agrícola.